El yoga ayudará a los niños en su largo camino hacia el dominio físico y psíquico

¿Te parece difícil que tu hijo o hija consiga mantenerse quieto, callado y concentrado en una de las posiciones del yoga? Seguro que a muchos padres les parecerán casi imposible, pero la verdad es que la práctica del yoga os demostrará que todo es posible. Todo dependerá de la motivación, paciencia, persistencia y trabajo conjunto entre los padres y el profesor de yoga del niño.

  

Beneficios de la práctica del yoga con los niños

A través del yoga, los niños ejercitarán su respiración y aprenderán a relajarse para hacer frente al estrés, a las situaciones conflictivas y a la falta de concentración, problemas tan evidentes en la sociedad actual. El yoga les ayudará en su largo camino hacia el dominio físico y psíquico. Lo que consiguen a nivel físico y mental los niños que practican yoga:

 

1- Desarrollo y destreza de los músculos motores. 

2- Flexibilidad en las articulaciones. 

3- Mejora de los hábitos posturales de la columna vertebral. 

4- Masaje de los órganos internos. 

5- Mejoría en los hábitos de la respiración. 

6- Estimulación de la circulación sanguínea.

 7- Mejoría de la autoestima. 

8- Baja en el nivel de estrés infantil. 

9- Perfeccionamiento de los sentidos. 

10- Agilidad y entereza. 

11- Calma y relajamiento. 

12- Estiramiento. 

10- Mejor desarrollo de la atención, concentración, memoriae imaginación. 

11- Armonización de la personalidad y el carácter. 

12- Oportuna canalización de la energía física. 

13- Mejor comprensión e interacción con los demás.

  

Recursos y práctica del yoga con niños

Las clases de yoga asocian el trabajo corporal y mental. Tratándose de niños, la motivación es un factor muy importante. En razón de eso, es conveniente que en una clase de yoga no haya más de 15 niños reunidos. Los niños deben sentirse cómodos y relajados. Deben vestirse con ropas holgadas, ligeras, confortables y que les permitan hacer cualquier movimiento con comodidad.

 

Las clases deben sean ministradas en un ambiente limpio, tranquilo, ventilado y silencioso. Se pueden utilizar colchonetas o alfombrillas apropiadas y los niños pueden estar descalzos o con calcetines. El yoga puede ser practicado a cualquier hora del día, pero el mejor horario para su práctica es por la mañana. Además es recomendable que se evite la ingestión de alimentos sólidos dos horas antes de su práctica.

 

La respiración del Yoga

La respiración es una parte integral del yoga. El inhalar y exhalar por la nariz es esencial para que el niño pueda estirarse y obtener el equilibrio necesario para empezar a practicar las posturas del yoga. Una vez que el grupo controle su respiración, el profesor empezará con las posturas.

El objetivo de las posturas es, desde los órganos exteriores, ir calmando a los órganos interiores. Con los niños, las posiciones hay que ir practicándolas poco a poco. Lo ideal, al principio, es que aprendan a respirar, relajarse, después a concentrarse. Para los niños, el yoga debe ser practicado como se tratara de un juego.

No debe exigirles que repitan una postura una y otra vez porque eso puede convertirse en algo muy aburrido para ellos. Hay que ir variando las posturas y los movimientos despacio y a un ritmo que los pequeños no pierdan la concentración. Como ya hemos dicho, el ánimo y la motivación son cruciales en este sentido; el respeto, la moderación, y una actitud positiva y alegre, también.

 

A través del yoga, los niños ejercitarán su respiración y aprenderán a relajarse para hacer frente al estrés, a las  situaciones conflictivas y a la falta de  concentración, problemas tan evidentes  en la sociedad actual.  El yoga les ayudará en su largo camino hacia el dominio físico y psíquico

 Desarrollo y destreza de los músculos motores. Estiramiento. - Flexibilidad en las articulaciones. - Mejora de los hábitos posturales de la columna vertebral. - Masaje de los órganos internos. - Mejoría en los hábitos de la respiración. - Estimulación de la circulación sanguínea. - Mejoría de la autoestima  y reduce el nivel de estrés infantil. - Perfeccionamiento de los sentidos. Agilidad y entereza. - Calma y relajamiento. Oportuna canalización de la energía física. - Mejor desarrollo de la atención, concentración, memoria e imaginación. - Armonización de la personalidad y el carácter. Mejor comprensión e interacción con los demás.

 

Yoga infantil: la unión de juego y relajación

Todos los niños pueden beneficiarse de los efectos positivos del yoga.

Los padres buscan actividades para sus hijos que, además de divertirles, tengan beneficios positivos para su desarrollo físico y psíquico y para su salud. El yoga para niños puede ser una buena opción para unir juego con relajación, concentración y equilibrio. 

Originario de la India, la palabra yoga significa 'unión', unión primero con uno mismo - el niño se encuentra con sí mismo, aprende a conocerse a sí mismo -, y después con los demás - los pequeños aprenden a relacionarse y comunicarse con su entorno -. 

 

Cuándo puede mi hijo practicar yoga

Los expertos coinciden que la mejor edad para que el niño se adentre en los ejercicios del yoga es a partir de los 4 años. A esa edad los pequeños ya saben perfectamente lo que se puede esperar y se quiere de ellos y ya tienen la capacidad de realizar y controlar ciertos movimientos del cuerpo. 

A esa edad, para los niños, la práctica del yoga es una actividad lúdica. No obstante, gracias al yoga consiguen olvidar las posibles situaciones de presión o estrés que aparezcan en el colegio o en casa y se relajan, adoptando una actitud tranquila, reduciendo tensiones y facilitando su concentración y autocontrol. Además favorece su potencial creativo y potenciar su talento. 

El yoga está indicado para todos los niños.

El yoga es una actividad recomendada para todos los niños y niñas. La búsqueda del equilibrio y la armonía constituye una buena base para que, en el futuro, los pequeños disfruten de una vida adulta alegre y saludable. 

Tanto para el niño inquieto o activo como para el tímido o vergonzoso, el yoga ayuda a canalizar su energía y reafirmar su autoestima. Ayudará a los más activos a aprender a relajarse y concentrarse más, mientras que también fomentará que los niños más callados pierdan su miedo ante los demás y se abran al universo que les rodea. 

Consecuentemente, en función del temperamento de cada niño habrá que planificar las clases de yoga con unos tipos de ejercicios u otros. El doctor Pedro Martínez López explicaba en un artículo para la revista de la Asociación Española de Practicantes de Yoga (AEPY) que no se puede planificar "una práctica estándar del yoga igual para todos los tipos de niños, sino que antes tenemos que estudiar y analizar el temperamento de cada uno". A su juicio, hay que tener en cuenta "diversas características que luego influirán en la formación de una personalidad y de un desarrollo físico normal o desviado". Estas características son:

- Nivel de actividad del niño: frecuencia y rapidez de sus movimientos.

- Regularidad o irregularidad en sus funciones fisiológicas: sueño, hambre, etc.

- Reacción a experiencias nuevas como un dormitorio nuevo o estar con personas desconocidas.

- Mínima fuerza o estímulo necesarios para llamar su atención para realizar un nuevo movimiento o actividad.

- Energía de expansión en la que expresa sus emociones, estados de ánimos, deseos, ilusiones, etc. 

- Humor.

- Facilidad con la que su atención de desvía de una a otra actividad por algún estímulo periférico. 

- Tiempo de atención ininterrumpida hacia una actividad simple como ver la televisión o hacia una postura.

Por todo ello el yoga es una actividad muy recomendada para los niños, un juego que favorece su desarrollo en todos los sentidos y le ayuda a relajarse, concentrarse y llevar una vida más tranquila ahora y en el futuro, manteniendo siempre una actitud positiva. 

  

El déficit atencional y la hiperactividad son dos trastornos en los que hay una falta de atención generalizada y una impulsividad muy clara. Muchos padres han optado por el yoga para niños con hiperactividad, ya que es un eficaz tratamiento complementario que incluye ejercicios físicos, técnicas de respiración y meditación.

El yoga en niños con hiperactividad

El yoga es una disciplina eficaz en niños con hiperactividad, ya que ayuda a desarrollar la conexión entre la mente y el cuerpo, brinda herramientas de autorregulación, siendo el único tratamiento no médico para la hiperactividad con amplio apoyo científico.

Los beneficios incluyen una elevada conciencia corporal y una mejora notoria de la coordinación mediante el desarrollo del cerebelo. Las diferentes posturas del yoga ayudan a los niños con hiperactividad a organizarse dentro del espacio y a controlar mejor su cuerpo. También genera procesos dentro del cerebro, fortaleciendo el crecimiento de los nervios.

Además, es beneficioso para todas las personas por mejorar la circulación y la flexibilidad de nuestro cuerpo, algo de lo que también se ven beneficiados los niños. Los niños con hiperactividad suelen utilizar el lado derecho del cerebro, de forma que el yoga es una forma muy fácil de enseñar a sus hijos sobre su propio cuerpo, mente y emociones.

Las emociones se regulan fácilmente mediante la respiración, lo que también hará sentir mejor a los pequeños, a medida que entrenan la mente con la meditación, aprendiendo a centrarse en una única cosa, punto fundamental en los niños con déficit atencional. De esta forma, se les enseña a desechar los estímulos poco importantes y aprovechar los necesarios.

  

La meditación también ayuda a cambiar la estructura de nuestro cerebro, engrosando las zonas relacionadas con la atención y el procesamiento de la información sensorial.

La autodisciplina, la autoevaluación y el autocontrol de sus pensamientos y emociones mediante el yoga frenan notablemente la impulsividad y la hiperactividad, ayudándolos a reflexionar sobre su vida.

Formas sencillas de hacer ayudar niños hiperactivos

Practicar el contacto visual

Esto permite ver si los niños están interesados y prestan atención. Podemos practicar el desplazamiento de la atención haciendo que el niño cambie la mirada entre dos o más adultos. Debemos buscar siempre que el niño mire a los ojos, para ver que realmente está atento a eso.

 

Inculcar una actitud de “yo puedo”

Se debe alentar a los niños, mediante juegos y tareas, a una idea más positiva de la vida y de lo que pueden hacer. De esta forma, aumentaremos rápidamente el rendimiento de los pequeños de la casa.

 

Practicar la escucha y el dar opiniones claras

Desde juegos hasta espacios de reflexión, podemos crear diferentes ambientes en los que el niño necesite escuchar con atención para conseguir lo que quiere y que aprenda a decir lo que piensa de forma ordenada y tranquila.

Practicar la quietud

En momentos en que nuestro hijo se vea exaltado o emocionado en exceso por un acontecimiento, debemos enseñarle a comportarse con calma y permanecer sentado y quieto.

 

Animar a fijar metas y hacer planes

La meta es a lo que queremos llegar, el plan es cómo hacerlo. De esta forma, aprenderán que a veces se necesitan varios puntos y un montón de atención para lograr lo que queremos.

 

Por estas razones es que es tan importante el yoga para niños con hiperactividad, ya que puede ayudarlos a mejorar su atención, calmar sus ansias y mejorar su bienestar. ¿Tienes un hijo con hiperactividad? ¿Qué métodos utilizar para ayudarlo?

  

Centro Saada.  Directora del centro Saada   ANISAH

DIRECCIÓN C/ Ercilla, 46 (Sta. Mª de la Cabeza), junto al Paseo Vallejo Nájera  y muy cerca de la Glorieta de Embajadores.  A 10 min. de Atocha.    

Metro y tren: Embajadores /Acacias Bus: 6, 55, 60, 78, 148 

HORARIO DE RECEPCIÓN Lunes a viernes, de 18.00 a 21.00   Agosto cerrado

Afin a las actividades, sus instalaciones se definen en dos  plantas ambientadas con pura filosofía oriental, espacios  amplios y confortables, basada su distribución en las técnicas de  fenshui.

Saada es un Centro especializado en técnicas orientales y de  salud, en el que un equipo profesional se dedica a la enseñanza  de danzas étnicas, el trabajo corporal, crecimiento personal,  además de otras técnicas novedosas y originales propias de la  cultura árabe, hindú y asiática

                      Contacto: 91 474 42 45 / Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.